domingo, 23 de febrero de 2014

A VECES VIENE LA SACUDIDA

A veces viene la sacudida
tras el tramo que acontece
perdida la flor del día
en un rincón de la vida,
en el jardín que se abandona:
Ayer pensé en tu sombra
asombrando mi figura humana,
y me perdí en la arana
creyendo que todo era nada,
una simple pintura
sin desmerecer los grises
que anuncian la nueva mañana.

Ayer creí en tu sombra
para despertar al alba,
al cielo que nos separa
y descubrí tu rostro
postrado en una almohada;
sentí tus cabellos negros,
la boca de caramelo
y una sonrisa breve
cuando también la mirada.

No hay comentarios: